Desde la aparición en escena de Juan Quintero y Luna Monti -hace ya dos lustros- el formato del dúo mixto de proyección folklórica no experimentó variaciones significativas.
(aunque, a veces, el lobby trate de vender a la nueva parejita que supuestamente "renueva el folklore")
Hasta que Nacho y Popen Vidal -desconocidos aún en el mercado pero con mucho kilometraje a cuestas- aceptaron el reto y condujeron esa formación hacia nuevos territorios.
Por eso, escuchar cantar a los Elefantes es irse de aventura.
El Dr. insiste en introducirlos a todos ustedes, de cabeza y a las patadas, en lo profundo de la posmodernancia.
El Dr. no se va a gastar en atribuirle un "género" a las creaciones de estos muchachos (un guitarravocalista y un chelista, ambos con profuso acceso a los unos y ceros).
El Dr. les adjunta un video probatorio, les dice que bajen por acá, y buenas noches los pastores.